Las aguas pluviales y superficiales se filtran y penetran en el subsuelo.
Cuando un estrato de roca impermeable impide que el agua pluvial descienda a una profundidad mayor, permitiendo la formación de una cuenca de captación natural, se forma un acuífero subterraneo.
Los acuíferos subterráneos constituyen la reserva de agua dulce más grande del mundo y representan más del 97% de toda el agua dulce disponible en nuestro planeta.
El agua subterránea se utiliza con fines potables, pero también es un recurso importante para la industria y la agricultura.
El impacto de las actividades humanas (agricultura, industria, ganadería) pueden suponer la alteración y la contaminación de las aguas subterráneas convirtiéndolas en inadecuadas para nuestro uso y necesidades.
Esta contaminación puede derivar de la emisión directa de una sustancia contaminante o provenir de sustancias sólidas disueltas por las lluvias y filtradas bajo tierra.
Para hacer frente a la contaminación de un acuífero, además de los programas de control y prevención de la contaminación, que deben ser la prioridad de una empresa avanzada, se pueden implementar tecnologías y sistemas de proceso para reacondicionar las aguas y permitir la recuperación para su uso.
Italplant ha desarrollado varios sistemas de tratamiento y recuperación para aguas subterráneas contaminadas por Cromo Hexavalente y por Metales Pesados, mediante la aplicación de resinas selectivas especiales capaces de capturar los contaminantes presentes.
Con procesos de membranas de Ultrafiltración y Ósmosis hemos creado sistemas de purificación y desmineralización para aguas de uso industrial con diferentes aplicaciones.
La presencia de Nitratos (derivados del uso generalizado de fertilizantes) en las aguas subterráneas también puede reducirse mediante el uso de sistemas de membranas o con resinas especiales o materiales filtrantes.
Del mismo modo se puede aplicar su uso ante la posible presencia de Arsénico.
